¿Qué son?
Los laxantes son medicamentos que funcionan facilitando la evacuación y en general se utilizan para tratar los episodios de constipación.
En algunos casos, además, se utilizan para “limpiar” el intestino previo a realizarse estudios diagnósticos del colon (intestino grueso) y del recto.
Un laxante ideal debe estimular naturalmente al mecanismo de evacuación y ayudar a ésta, no debe provocar deshidratación, ni ser reabsorbido, así como tampoco provocar hábito.
¿Cuándo se utilizan?
Los laxantes son utilizados para el tratamiento de la constipación aguda, cuando las medidas higiénico dietéticas han fracasado.
Hay que tener en cuenta que el objetivo de la utilización de laxantes es favorecer la evacuación y no provocar diarrea. Por ello hay que evitar la sobredosificación, es decir no tomar más de lo indicado o sugerido, y se deben utilizar durante un período corto de tiempo.